Capítulo 18 - Isabelle

Los días siguientes pasan en un dos por tres. Con mucho trabajo, aunque sin mucha novedad.

Amy estuvo tocando en diferentes lugares de la ciudad, intentando cumplir uno de sus deseos [Ganar 50 simoleones en propinas] y ganando un poco de experiencia antes del recital.

Y, aunque no muchas personas le prestan atención…

poco a poco va cumpliendo su cometido…

Así transcurren los días... Con Amy yendo a trabajar, y luego tocando por aquí y por allá en la ciudad.

Y esas horas tocando en los diferentes lugares son las mejores horas de su vida.

Porque al volver a casa…. La lluvia la espera. Y no es algo que le emocione mucho.

Pero bueno, al menos en la casita de Ciao puede estar un poco a salvo de los relámpagos.

Mientras aprovecha de darle un poco de mimos a la nena.

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Y llega el gran día: El día del recital, y también el día en el que conocerá a la familia de Jace.

Ese día en la mañana Jace le escribe a Amy diciéndole que le esperará en la plaza del sector medio de Myshuno, así que, luego de arreglarse un poco, la chica se dirige al lugar, en compañía de Ciao, que no puede faltar:

- Ya estamos llegando a la plaza, así que debe estar por acá cerca…

Amy camina en dirección a la plaza, buscando a Jace, hasta que lo visualiza a lo lejos, conversando con una mujer de cabello color azabache.

“Allí está”, dice Amy en su cabeza, sonriendo mientras se detiene.

- ¿Esa es su hermana?... pensé que sería rubia como él. Mmm… tal vez uno de sus padres es moreno… Pero, ¿por qué no lo mencionó?

Amy no es la única que ve a Jace a la distancia. Al parecer, Ciao también lo hace y enseguida sale corriendo hacia él.

Jace observa a Ciao, quién se detiene frente a sus pies.

- Hola Ciao hermosa, me has encontrado antes que tu dueña… ¿Cómo estás, pequeña?

- Ha traído una mascota… - comenta la mujer de cabellera negra – espero que se lleve bien con el gato del infierno…

Jace ignora el comentario de su hermana y levanta su mirada, observando a Amy, quien se acerca a donde están parados.

- bueno, aquí vamos… – dice por lo bajo – No digas nada innecesario. Recuerda que no sabe nada.

- La verdad me sorprende que traigas a una mundana contigo… pensé que te iban mejor las hadas…

- Deja de decir estupideces, Isabelle... Ya lo entenderás cuando la conozcas…

- Yo solo digo que todos van a dar el grito al cielo cuando entren por la puerta. Supongo que planeas ascenderla…

- Eso no va a ser necesario. Ahora calla que ahí viene.

- ¿Cómo es que no-?

Jace le hace ademán para que se calle.

- Shh

Amy termina de acercarse y, luego de saludarla con un efusivo abrazo, Jace la señala a modo de presentación.

- Izzy, quiero presentarte a Amy... la chica con la que estoy saliendo... Amy, ella es Isabelle… mi insoportable hermana menor…

- Oye, puedes ahorrarte el comentario de “insoportable” y metértelo por el culo. ¿Qué maneras son esas de presentar?

Amy observa a Isabelle con una sonrisa. A medida que iba acercándose, los nervios se hacían más palpables, y ahora está hecha una gelatina… Pero al fin conocerá a la familia de Jace y ello le hace feliz... Eso significaba que su relación se estaba afianzando más, ¿no?

- Mucho gusto, yo soy Amy… - dice Amy mientras se inclina - Amy Fairchild, y espero no ser mucha molestia hoy.

Isabelle sonríe al verla inclinar y está a punto de decirle que no es necesaria tanta formalidad, pero una vez dice su apellido, se corta, entrecierra los ojos y observa a Jace:

- Uhhh… no mencionaste que tu chica fuese del CAMPO, Jace - dice con una sonrisa.

Jace no responde, pero no es necesario, ya que Amy se adelanta.

- ¿Cómo es que-

- Tu acento – le responde Isabelle, aun observando a Jace con una pregunta en sus ojos.

- No creí necesario mencionarlo… - responde éste al fin - supuse que lo descubrirías, aunque no lo hiciera.

Izzy levanta una ceja.

- Ya veo… -sonríe – esto es mejor de lo que imaginaba – comenta por lo bajo.

Luego, voltea hacia Amy, sonriéndole:

- Mucho gusto, yo soy Isabelle, la hermana del rubio menso de acá. Aunque puedes llamarme Izzy. Tu… acento me ha tomado desprevenida, pero no te preocupes, aquí no juzgamos a nadie – Isabelle suelta una risita - será un placer ayudarte a tener un poco de estilo, Amy Fairchild.

Amy sonríe. La chica parece muy maja, y directa. Espera que los demás sean igual...

- Y para mí es un placer conocerte. De verdad agradezco la ayuda que me puedas brindar. Jace me dijo que eras muy buena en tu trabajo. No he traído mucha ropa del campo y lo que tengo, digamos que no es apto para el lugar en el que voy a tocar.

- Jaja no te preocupes.

Izzy vuelve a observar a Jace.

- Justamente le estaba diciendo a Jace que tengo unos cuantos vestidos recién salidos del horno, ¿cierto?, y ahora que te he visto, creo que tengo unas cuantas opciones más que te podrían quedar muy bien. – pausa y se dirige a él – Realmente has traído a una linda muñeca para jugar, Jace.

Jace pasa la mirada de su loca hermana a Amy.

- El estilo de Izzy puede resultar abrumador, así que no dudes en decirle lo que te gusta y lo que no – le sugiere a la pelirroja.

- Ey… La que sabe aquí soy yo. Ya me ha dado cuenta de su estilo… conservador – dice después de una pausa - Seguramente la… aligere un poco, pero la dejaré como una hermosa muñeca de porcelana.

- En mi opinión, las muñecas de porcelana son bastante creepy, así que preferiría que la dejaras como un lindo angelito – responde Jace, y luego observando de nuevo a Amy comenta: - ya lo sabes, Amy, no te dejes llevar por las locuras de esta loca.

Amy sonríe.

- De acuerdo.

Isabelle levanta las cejas y luego rueda los ojos mientras dice:

- Como sea, basta de chácharas. Tenemos un montón de cosas que preparar así que será mejor que nos pongamos en marcha.

- Sí, tienes razón – le responde Jace – mientras más rápido salgamos de esto, mejor.

Isabelle sonríe mientras observa a Jace.

- No puedo esperar para ver la reacción de mi padre cuando conozca a Amy Fairchild…

- ¡Isabelle!

- Espera… no… más épica será ver la reacción de Alec.

- ¿Quieres dejar de asustarla? Estoy seguro que se comportarán como las personas civilizadas que son…

Amy observa de uno al otro. Esos últimos comentarios de Izzy han sido muy raros, sobre todo el énfasis que Izzy ha hecho en su apellido. Sí, es poco común, pero…

- Vamos… - dice Jace.

Los tres caminan un poco, hasta llegar frente a un edificio un poco viejo, aunque imponente [Mis construcciones son cutres así que no esperen maravillas xD]. Amy observa sin palabras.

- Bienvenida a nuestra humilde morada – dice Isabelle.

- Vaya…

Isabelle voltea hacia Jace y Amy.

- Iré a avisar a mis padres de que hemos llegado. Tómense su tiempo para cursiladas antes de entrar.

Y con eso dicho, continúa su camino hacia dentro de “casa”.

Cuando Isabelle les deja solos, Amy voltea hacia Jace y éste comenta:

- No le hagas caso, solo quiere molestar.

- Me agrada – Le responde Amy y luego de mirar a Jace por unos segundos, decide preguntar - Entonces…. ¿Cuándo planeabas decirme que eras un chico rico?...

- Quiero decir, no es como si cualquiera pudiera adivinar que un chico que trabaja como empleado en un bar es rico.

Jace la observa con seriedad.

- No somos ricos, Amy. Vivimos acá porque mis padres… heredaron el lugar. Además, es solo una vieja construcción y por dentro es bastante cutre.

- Bueno, por lo menos pudiste decirme que vivías en una mansión… aunque no fueses un chico rico…

- No es una mansión.

Amy mofa.

- Ahora entiendo por qué te molestó tanto que viviera en una tienda de campaña… - Amy hace una pausa – Espera. ¿Por qué demonios has querido dormir en una tienda conmigo cuando vives en un lugar como este?

- Porque estaba contigo. Amy… donde viva no tiene importancia.

- Aunque te hubiese dicho antes que vivía en este lugar, eso no hubiese cambiado nada. Igual no hubieses aceptado venirte a vivir acá.

- ¿Cómo estás tan seguro?

- Porque te conozco, eres la persona más cabezota que conozco – “Además, aunque quisiera, no podía hacerlo”, piensa.

Amy observa a Jace fijamente y luego de unos segundos en silencio, habla.

- De acuerdo, en parte tienes razón, así que te concedo eso.

Jace sonríe.

- Lo que digo...

- Ahora… - continúa diciendo Jace - ¿te importaría si entramos?... seguro que ya no están esperando… ¿lista para conocer a mi familia?

Amy le sonríe, toma aire y suspira.

- De acuerdo… vamos, no es como si tuviésemos algo más que hacer…

Ambos comienzan a caminar hacia la entrada y, de repente, las puertas del lugar se abren automáticamente, dándoles la bienvenida....

Amy lo había visto con Izzy, pero es realmente cool.

- Puertas automáticas… y dices que no vives en una mansión.

- Sí, sí… - dice Jace, restándole importancia, no son puertas automáticas, pero prefiere que siga creyendo que lo son. Al fin y al cabo, con ella eso es lo que siempre parecerán.

Ambos se adentran al edificio y las puertas de la entrada se cierran luego de pasar.

Suben las escaleras y cruzan el umbral, para encontrarse con el resto de la familia.

---------- Fin del capítulo 18 ----------